Buscando casos reales de tráfico de
personas, he encontrado una página web donde explica en que consiste, los
fines, consecuencias, indicadores y las diferencias entre trata de blancas y
tráfico de personas. En esta misma página hay 3 casos, los cuales son interesantes
de leer, cada uno es diferente pero todos con el mismo fin conseguir dinero
para su familia, poder tener una vida mejor y que al final acaban siendo
engañados.
A continuación os he escrito uno de
estos casos para que podáis leerlo y decir que pensáis sobre esto y también os
pego la página web por si queréis entrar a mirar los otros casos.
CASO:
TODO SALDRA BIEN
Me pregunto cuántos han pasado esta
espantosa experiencia; me da rabia saber que caí en manos de gente tan
inescrupulosa, no me explico cómo un ser humano le puede hacer esto a otro ser
humano, no tengo ni palabras para describirlo.
En mi país la situación está muy
difícil, nuestra tierra no sólo es golpeada por la pobreza, sino también por
guerras y por el clima que a veces no perdona.
No tienes nada y la poca posesión te la quitan o no te da ni para comer.
Me casé con la esperanza de tener una
familia, de salir adelante, somos muy unidos.
Estaba contento con mi esposa y mis hijos, pero no soportaba ver que se
enfermaban y no podía llevarlos a un hospital, saber que me pedían comida y no
podía darles más que arroz. Y mi pobre
esposa me miraba sin decir palabra, sin reclamar nada, pero en sus ojos podía
ver su angustia y sufrimiento.
Es por eso que me embarqué junto con
un primo para trabajar en el mar
como pescadores, no tenía
mucha experiencia, pero sentí que no era un trabajo difícil y la paga era muy
buena, ese dinero se lo enviarían a mi
familia y yo me quedaría con un pequeño porcentaje, sólo en caso de
ocupar cosas para el cuidado
personal, o para cubrir necesidades.
El plan estaba muy bien, mi esposa Lu tenía miedo pero me senté con
ella, platicamos y vimos que era nuestra única salida.
Vendí algunas herramientas que tenía y
reuní el poco dinero que poseía, era la reserva para unos meses producto de un
trabajo que había realizado, pero pensé que mi familia recibiría el dinero casi
de inmediato a mi partida como
parte del contrato y no me preocupé, pensé - todo saldría bien.
Recuerdo como si fuera hoy cuando llegué
a la casa de mi primo para juntos empezar el viaje, nunca habíamos subido a un
avión y teníamos que tomar tres, luego nos esperaban en el aeropuerto y de ahí
nos llevarían al lugar destinado y nos mostrarían en qué consistiría el
trabajo, un poco de preparación y listo, al barco y a trabajar.
Cuando llegamos todo fue diferente, sí
teníamos que trabajar en un barco, pero las redes se destinaron no sólo a la
captura de los peces, estaban echadas sobre nosotros, quienes fueron capturados
fuimos nosotros con nuestras esperanzas de un futuro mejor. Pasamos hasta seis meses en ese barco, hacinados, había gente de todo lugar, gente
que no conocías pero que tenían los mismos anhelos y la misma frustración al
verse engañados. Fuimos golpeados,
pasamos hambre y sed, no había hora- rios, simplemente debíamos trabajar como
fuera y en las condiciones que fueran.
Me mantuve siempre calmado por mi
familia, si reclamaba sabía que me golpearían, si pe- leaba con mis compañeros
me podían hasta matar. Lo único que me
confortaba era una pequeña foto desteñida de mi familia que había logrado
guardar muy bien, sentía que era mi única protección, porque todo me lo
quitaron hasta mi pasaporte, me deja- ron un
poco de ropa y nada más.
A veces me sentía desconectado del
mundo, cómo poder huir o tener un espacio para ti, cuando pierdes hasta tu
nombre, eres uno más, tu único valor es un precio, algo que se puede
mercadear.
Sobreviví a esa experiencia, tenía la
posibilidad de quedarme en ese país o retornar con la vergüenza de no haber
realizado el sueño para mi familia, pero pensé qué necesitaban mis hijos, ese
dinero o a su padre?
Ahora trabajo de sol a sol, pero ya mi
techo no es aquel barco herrumbrado, mi techo es el cielo, mi cobija es mi
hogar, mi alimento es mi familia. Abrazo a mi hijo, levanto mis ojos al
horizonte, y le dijo a su oído, todo
saldrá bien.
En mi opinión me parece lamentable que
cada vez haya más casos de tráfico de personas y trato de blancas.
No entiendo como hay personas que son
capaces de llegar a engañar, utilizar a personas como esclavas para obtener
múltiples ganancias con ellas y mucho menos matar, esto es un delito que atenta
contra la dignidad del ser humano.
Considero que tendría que haber más
protección y ayudas para las personas que han sido víctimas de estos delitos, y
que hubiera más estrategias para prevenir la trata de blancas o el tráfico de
personas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario